domingo, 16 de junio de 2013

(Foto: Fran Jiménez)

El Juli y Perera, ovacionados

Por Íñigo Crespo
No ha podido empezar mejor la nueva etapa de Fernando Adrián como matador de toros. Dos orejas y sensación de torero asentado y con las ideas claras. Le cedió los trastos El Juli en presencia de Miguel Ángel Perera para estoquear a Pelotillo, de San Mateo, número 41, de 490 kilos, al que Adrián recibiócon cinco faroles de rodillas demostrando que venía con ganas. Después estuvo variado con el capote quitando por saltilleras y gaoneras. Brindó a Gómez Escorial antes de cuajar una faena templada y académica por los dos pitones de un toro noble y con clase. Dejó patente su buen corte de torero. Destacaron dos tandas por el pitón izquierdo muy reposadas y corriendo bien la mano. El final de cercanías llegó al público. Tuvo en su mano una oreja más del que cerró plaza, un toro de Carmen Lorenzo manejable. Fue una faena de menos a más con un final entre los pitones que llegó a la gente y con unas emocionantes bernadinas. Pero marró con la espada y se esfumó el trofeo.
El primer toro de El Juli, con el hierro de Carmen Lorenzo, fue un animal noble pero rebrincado y difícil. Faena técnicamente perfecta del madrileño que lo dominó pero sin exigirle, ya que en cuanto se sentía podido, el toro comenzó a defenderse. Tampoco tuvo suerte El Juli con el cuarto, un toro bajo de raza y que blandeó. Unas condiciones que acrecentó tras sufrir una voltereta a la salida de un quite. El Juli intentó sostenerlo y extraerle una faena pero fue imposible. Saludó una ovación.
El tercero de la tarde fue un toro manso y rajado que no se lo puso fácil a Miguel Ángel Perera. A pesar de ello el extremeño volvió a demostrar su capacidad y a base de mimo y de consentirle consiguió meterlo en la muleta para, una vez fijado, completar dos buenas tandas, una por cada pitón, al final de la faena. Pudo cortar una oreja de no fallar con los aceros. También se le fue con la espada la oreja del quinto, un toro de Carmen Lorenzo con movilidad pero sin clase. Perera estuvo por encima de su oponente en una faena larga tratando de sacar provecho de un animal manejable pero que no humilló ni se entregó. Dimensión de torero cuajado. Metisaca y estocada antes de saludar una ovación.
Sábado, 15 de junio de 2013. Toros de San Mateo (1º), Carmen Lorenzo (2º, 4º, 5º) y San Pelayo (3º). El 1º, noble y enclasado. El 2º, complicado. El 3º, manso. El 4º, desrazado. El 5º, sin clase. El 6º, manejable. EL JULI: Ovación y ovación con saludos; MIGUEL ÁNGEL PERERA: Ovación con saludos tras aviso y ovación con saludos; FERNANDO ADRIÁN, que toma la alternativa: Dos orejas y silencio tras dos avisos. Entrada: Tres cuartos. Saludó en banderillas en el sexto Raúl Adrada

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