El rejoneador Rubén Sánchez pasea dos orejas en Moraleja
Su compañero de cartel, Iván Magro, se llevó un apéndice del primero de su lote, de la ganadería de Monteviejo
17.07.12 - 00:02 -
El rejoneador Rubén Sánchez salió ayer a hombros en Moraleja tras cortar cuatro orejas a los ejemplares de la ganadería de Monteviejo, (propiedad de Victorino Martín) que lidió junto a Iván Magro, que paseó un apéndice en el festejo celebrado con motivo de las fiestas de San Buenaventura.
Abrió plaza Iván Magro, que estuvo firme y correcto en su primero al que le cortó una oreja. No tuvo suerte con el segundo de su lote con el que nunca se entregó ni arriesgó. Falló con el rejón de muerte por lo que se despidió de la plaza saludando desde el tercio. El novillo escuchó palmas al arrastre.
Gustó mucho a la afición de Moraleja Rubén Sánchez que estuvo bien durante la lidia del primero pero se atascó con los aceros y tuvo que usar el descabello. Aplausos. La situación cambió en el segundo toro. Demostró seguridad y confianza, además de ganas de agradar. Iba a por todas y no falló con el rejón de muerte por lo que paseó las dos orejas que le abrían la puerta grande.
La plaza registró tres cuartos de entrada en tarde agradable. Entre los tendidos se encontraban, viendo el juego de sus toros, Victorino Martín padre e hijo.
Protagonistas
Los toros que se lidiaron por la tarde fueron los protagonistas del encierro que se celebró ayer a la una del mediodía. Los 'patasblancas' de Monteviejo fueron los protagonistas de la jornada. Al salir de los corrales de la calle Goya, los morlacos iban acompañados de los mansos, y lo hicieron todo el recorrido hasta llegar a la plaza de toros. Los corredores, incluso estando prohibido, no dudaron en recortar a las reses durante el trayecto que duró alrededor de cinco minutos.
Uno de los novillos quedó rezagado, por lo que pasada la una y diez del mediodía tuvieron que volver a soltar a los mansos desde la plaza de toros hasta los corrales de la calle Goya para buscar al cuarto novillo del encierro. Este ejemplar tardó en completar el recorrido unos cuatro minutos.
Los aficionados pudieron disfrutar de unos encierros cargados de emoción y a pesar de ser lunes, numerosos vecinos de la comarca se dieron cita para presenciarlos.
Por fortuna, no hubo que lamentar ningún herido por asta de toro. Tras finalizar el encierro se dio suelta de una vaca para ser lidiada al estilo tradicional.
Tampoco hubo heridos en el denominado 'toro del aguardiente' que se lidió en las calles de Moraleja la madrugada del domingo al lunes. Este encierro comenzó a las cinco de la mañana, con salida de la res desde los corrales de la calle Goya hasta la plaza de toros. Fue rápido y limpio, con una duración aproximada de dos minutos.
Ya en la plaza, a las cinco y cuarto, comenzó la lidia del mismo al estilo tradicional. En esta ocasión, con menos público asistente. Durante 15 minutos los pastores tuvieron que batallar con el animal que se negaba a abandonar la plaza en dirección al recinto vallado.
La lidia duró cerca de una hora, dando buen juego y marcando los aficionados la distancia. No hubo que lamentar ningún herido que precisase de la atención médica en la enfermería. El astado, de la ganadería de Carmen Valiente, fue el mejor toro lidiado hasta ahoar en las calles de la población en estas fiestas de San Buenaventura 2012.
Unas fiestas que ya se acercan a su fin. Para la madrugada del lunes al martes estaba previsto el encierro y posterior lidia de un toro por las calles de la localidad. A la una se celebrará el encierro infantil y el pasacalles. Por la tarde, a las siete y media, comenzará el espectáculo cómico taurino 'El chino torero y sus enanitos forcados'. Este festejo comenzará a las siete y media de la tarde en la plaza de toros de la localidad.
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