lunes, 10 de septiembre de 2012


Los tres novilleros, a hombros

José Garrido, Posada de Maravillas y Lama de Góngora lidiaron en Don Benito seis erales de 'El Freixo', de 'El Juli', un encierro bien presentado 

10.09.12 - 00:25 - 
Los novilleros abandonan la plaza a hombros entre aplausos | PAKOPÍ
José Garrido, Posada de Maravillas y Lama de Góngora, novilleros que componían el cartel que cerraba la feria taurina de Don Benito salieron a hombros tras lidiar seis erales de la ganadería de 'El Freixo' propiedad de Julián López 'El Juli', que envió un encierro bien criado y presentado siendo de mejor juego los tres primeros aplaudiéndose al arrastre al primero y segundo y dándole la vuelta al ruedo al tercero.
Garrido escuchó ovación en su primero tras una gran faena a un novillo bueno para la muleta toreando con profundidad y mucho gusto, estropeando un gran triunfo por el mal manejo de la espada. En su segundo, un novillo sin entrega, con poco recorrido y protestando en la muleta estuvo muy por encima de él acabando con un tremendo arrimón junto a tablas. Tras una estocada cortó dos orejas.
Con la mano izquierda
El mismo premio había obtenido en su primero Posada de Maravillas tras una faena en la que sobresalió el toreo con la mano izquierda a un novillo fijo, bravo, alegre y repetidor.
Un torito parecía el quinto que cabeceó en el capote y repetía sin entrega consiguiendo los mejores momentos cuando lo hizo sobre el pitón derecho, aunque se empeñó demasiado en hacerlo con su mano preferida, la izquierda, por donde el novillo embestía peor. Ras media desprendida. Cortó otra oreja.
El sevillano Lama de Góngora mostró excelentes formas en el toreo a la verónica al novillo que le arrancaba de lejos a la muleta, que manejó de forma muy templada en muletazos largos por ambos pitones al mejor novillo de la tarde premiado con la vuelta al ruedo. Tras estocada que asomó por abajo y descabello le concedieron una oreja.
El sexto fue un manso berreón que no hizo más que defenderse y al que solamente pudo sacar algunos muletazos sueltos ante la insistencia del novillo por huir de la pelea.
Estuvo generoso con el novillo al que le costó cuadrar antes de una estocada similar a la del tercero y lo premiaron con una oreja.
Al final, triunfo y salida a hombros para los tres novilleros que dejaron entrever un buen futuro para la fiesta.

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