Puerta grande populista para César Jiménez en Burgos
Destaca el valor de Manzanares
Día 30/06/2012 - 13.39h
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La primera parte del festejo del día del patrón estuvo condicionada por el descastamiento de los impresentables astados de Juan Pedro Domecq.
Cambió la película con el cuarto, el mejor del encierro, al que César Jiménez desorejó tras una faena de corte populista, plagada de circulares, rodillazos y desplantes. Entre tanto toreo de cara a la galería destacaron alguna serie de naturales estimables que supieron a poco pues el toro tenía calidad para hacer un toreo más reposado. Aseguró con la espada con una estocada caída y le concedieron dos orejas demasiado generosas. Con el flojo y noblón primero planteó otro trasteo con tanta voluntad como falto de emoción.
Pasajes más hilvanados
A Manzanares le correspondió un lote deslucido que además tuvo complicaciones. Se mostró por encima de ambos aunque tuvo más entidad su labor ante el quinto por donde ejecutó los pasajes más hilvanados gracias al tesón del alicantino que no le quitó la muleta de la cara en ningún momento. Puso la raza que le faltó a un toro que pareció mejor en sus manos. Mató de estocada tendida, falló con el descabello y perdió un trofeo justo. Lo pasó peor con el abecerrado segundo que nunca se entregó, embestía a media altura y sin ninguna franqueza.
Cayetano sustituyó al lesionado Juli y aunque tampoco tuvo suerte con sus rivales -le correspondieron dos animales parados y deslucidos- no dejó buena sensación, en especial con la espada donde se mostró muy inseguro.
La plaza registró más de tres cuartos de entrada.
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