El «todoterreno» José Garrido triunfa en Gijón

ANDRÉS AMORÓS / GIJÓN

Día 10/08/2013 - 13.43h

La novillada que abrió la feria quedó en mano a mano por percance de Manolo Vanegas

SERRANO ARCE

José Garrido

Gran ambiente y casi lleno en la novillada nocturna que abre la Feria de Begoña, en el 125 aniversario de la Plaza de El Bibio. Los novillos de Nazario Ibáñez, bien presentados, serios, dan un juego desigual: muy bueno, el segundo; manejables, quinto y sexto; con dificultades, los demás. El más peligroso le toca al venezolano Manolo Vanegas, afincado en Ledesma (Salamanca), que debuta con picadores; después de varias volteretas, sufre una fuerte lesión de ligamentos en la rodilla derecha. Queda el festejo como un mano a mano del madrileño Francisco José Espada, que corta un trofeo, y el pacense José Garrido, que obtiene dos, en el último, y sale en hombros.

Francisco José Espada, de Fuenlabrada, muestra, con la muleta, más oficio de lo esperable. En el quinto, se luce en naturales con clase, liga circulares y mata con decisión: oreja.

A José Garrido lo apoderan Ferrera y El Tato. Nos causó ya buena impresión en Olivenza, a comienzo de temporada. Es un «todoterreno», con valor, oficio sólido y variedad. Los aceros le impiden cortar trofeos en sus tres novillos. En el segundo, muy bueno, está a la altura: larga de rodillas, verónicas cargando la suerte, naturales con la muletabarriendo el suelo... pero el descabello se le encasquilla. (¿Dónde ensayan ahora esta suerte los novilleros, al no poder hacerlo en los mataderos?). En el cuarto, sufre un puntazo pero se mantiene en el ruedo, con gallardía. Vuelve a fallar con la espada. En el último, cojeando, se muestra muy voluntarioso y le conceden dos orejas (al conjunto de su labor, en este novillo merecía una). Puede tener futuro.

Con la entrega de los novilleros, el público lo ha pasado bien y también se ha asustado, con las volteretas. Este sábado se anuncian ya tres figuras y se llenará el coso de El Bibio.

FICHA

Feria de Nuestra Señora de Begoña, viernes 9 de agosto. Novillada nocturna: casi lleno. Novillos de Nazario Ibáñez, bien presentados, de juego desigual: muy bueno, el segundo; peligroso, el tercero.

Por el percance de Manolo Vanegas (grana y oro), que debuta con picadores y sufre, en el tercero, una lesión en la rodilla, queda en un mano a mano.

Francisco José Espada, de berenjena y oro: pinchazo y estocada (saludos). En el tercero, pinchazo, media y siete descabellos (aviso, palmas). En el quinto, estocada (oreja).

José Garrido, estocada y siete descabellos (aviso, saludos). En el cuarto, dos pinchazos y estocada (aviso, vuelta). En el sexto, estocada (dos orejas, sale a hombros).